Dia 05: Munich, Nuremberg, Berlin, Sassnitz (925 kms.)

¡Guten Morgen!

¡Olé, qué bien hemos descansado! Son las ocho y ya estamos preparando la partida. Hoy tenemos previsto hacer noche en Grimmen. 

Caldera despertando en Munich delante de un mercadillo.

Grimmen se encuentra al norte de Alemania. La idea es embarcarnos en Sassnitz al día siguiente en el primer ferry que podamos coger. Así que nos espera una buena etapa maratón. 

Como ayer, cuando llegamos al museo BMW y al estadio Olímpico, era de noche y no los pudimos ver bien y éstos se encuentran al norte, al salir de Munich hemos pensado volverlos a visitar antes de salir de la ciudad.
Cuando vi por primera vez el estadio olímpico por la tele yo tenía 11 años. En aquella ocasión me impresionó aquella estructura transparente que parecía una gran jaima. Hoy lo ha vuelto a hacer. Es espectacular y se encuentra perfectamente conservada. Es una delicia pasear por el parque que lo rodea. Aunque al vigilante jurado no le pareció bien la idea de que lo hiciéramos en moto y muy  amablemente nos invitó a salir.

Estadio olímpico de  Munich

Y lo hicimos del estadio y de Munich. Rumbo al norte.
Empezamos a devorar kilómetros al trote de 120 por hora. Y según pasaba la jornada veíamos como pasaba el país debajo de las ruedas de Caldera. Cundía mucho. Al hacer relevos entre Jesús y yo la jornada iba pasando sin darnos cuenta. 250 kms en dos horas  aproximadamente, repostaje, un pipí, cambio de piloto y "palante". Hacía un día espectacular.
La verdad es que estar reunido todo el día contigo mismo dentro del casco da para mucho. Pensamientos que vienen y van. Me llego a emocionar de lo afortunado que me siento de poder hacer este especial viaje.
...y Alemania va pasando...
Dicen que Honda inventó la seda...
...y con la Goldwing hizo el mejor vestido.
Es una maravilla la jornada que estamos pasando a sus lomos.
Las autopistas alemanas son máquinas para desplazarse. Están perfectas. Igual que el día en que las inauguraron. ¿Blandones?¿parches? . Esas palabras no existen en alemán. En España hemos aprendido a llenar nuestra geografía de autovías y autopistas. Ahora tendríamos que venir aquí a aprender a construirlas y conservarlas.
Nos ha cundido tanto el día que podríamos llegar con hora de embarcar hoy mismo en el último ferry hacia Suecia. Así que pasamos Grimmen de largo y nos vamos a Sassnitz. El último ferry sale a las once y media y llega a Trelleborg a las 3.30.
Llegamos al puerto sobre las 20.30.  Sacamos los billetes y nos pusimos a revisar a Caldera. Nivel de aceite, presión de neumáticos, revisión de holguras...después de 3.950 kms. todo correcto.

Caldera funcionando como un reloj

Después de cenar al lado de nuestra moto, nos dispusimos a embarcar.
Si no llegamos a embarcar hoy, según los horarios que había de ferrys, al día siguiente no podríamos haber cumplido el programa. Fue una suerte que el día fuese tan productivo

El barco embarcado.

Y así, a las 23.30 pusimos rumbo a la península escandinava. Aún con la mar en calma tuvimos marejadilla en cubierta...

Pero eso lo dejo para la crónica de mañana. Ahora vamos a ver lo que resta del partido Holanda-Costa Rica...
¡Arbitro!,¡No ves que eso es fuera de juego...!